Bebés hechos con Inteligencia Artificial: tecnología y robótica para la reproducción humana
En el futuro podría surgir una nueva especie creada sin la intervención directa del útero materno.
La reproducción humana es un fenómeno natural que conecta íntimamente el acto biológico con el emocional, pero en un futuro no muy lejano, la inteligencia artificial (IA) y la robótica podrían trastocar este proceso, repensando los límites de la creación de vida y de la propia maternidad.
Lejos de ser sólo una teoría de ciencia ficción, esto se visualiza en la obra de la artista digital Viktoria, quien a través de sus redes sociales nos reta a imaginar un mundo en el que la tecnología y la biología ya no sean conceptos separados.
Viktoria creó una obra de arte que representa a un androide que sostiene a un bebé recién nacido en su vientre. La imagen plantea preguntas fundamentales sobre el poder de crear vida, así como el papel que podrían desempeñar las máquinas en el proceso de reproducción humana en un futuro dominado por la tecnología.
¿Podrían los androides ser los nuevos padres en el futuro?
Con esta imagen, el artista nos invita a imaginar la posibilidad de que un día seres artificiales puedan convertirse en "portadores" de una nueva generación, cuestionando fundamentalmente los límites entre lo humano y lo artificial.
La robótica y la IA han avanzado hasta el punto de superar muchos de los obstáculos tecnológicos que limitan su integración en la vida cotidiana. Desde robots humanoides que ayudan con las tareas domésticas hasta sistemas de inteligencia artificial que ayudan en los procesos de fertilización y terapia, la tecnología ha avanzado mucho. Así, la posibilidad de que un androide o un sistema artificial juegue un papel activo en la reproducción humana ya no parece tan utópica.
Cómo la inteligencia artificial ayudará a la reproducción
Los avances en biotecnología han abierto las puertas a escenarios antes impensables. La edición genética, el cultivo de órganos y el desarrollo de úteros artificiales son tecnologías que sugieren que en el futuro podríamos crear vida sin necesidad de recurrir a los procesos biológicos tradicionales.
Estas innovaciones podrían, en teoría, integrarse con sistemas avanzados de robótica e inteligencia artificial, capaces de monitorear y gestionar los procesos de gestación con una precisión que la biología por sí sola no puede lograr.
La cuestión es si la sociedad está dispuesta a conceder a una máquina la capacidad de albergar y traer nueva vida al mundo. Esto plantea implicaciones éticas y filosóficas para esta decisión. Con esta obra, el artista también sugiere que el papel de los androides no sólo será en la reproducción, sino que también invita a reflexionar sobre lo que realmente significa ser padre o madre.
¿Qué es un ser vivo después del avance de la inteligencia artificial?
Aunque la idea de que los androides puedan "crear" vida plantea dilemas tecnológicos, sus implicaciones emocionales y filosóficas son aún más complejas. Uno de los aspectos más desafiantes de esta integración entre la IA y la biología es la cuestión de la identidad y el significado de estar vivo.
Pensar en un futuro en el que las máquinas puedan participar en la creación y, posiblemente, en la crianza de los hijos, plantea preguntas sobre los límites de la humanidad.
Las emociones, una característica intrínsecamente humana, están ahora bajo la lupa de la ciencia. Los investigadores están estudiando si las máquinas podrían algún día "sentir" o crear vínculos emocionales con un ser humano, o qué pasaría si una IA o un androide pudiera entender y expresar emociones hacia el niño que "trajo al mundo". Puede que hoy en día las máquinas no sean capaces de sentirse como los humanos, pero la inteligencia emocional artificial está en desarrollo y ya es capaz de reconocer y responder a ciertos estímulos emocionales.
Asimismo, todas estas dudas plantean una reflexión inevitable: si un androide puede desarrollar un vínculo, aunque sea simulado, con un niño que "ayudó" a crear, podría desempeñar el papel de madre o padre, pero esto se analizará con el tiempo.